En el día de hoy (lunes 30 de enero) la Unión Portuaria de Chile realizó un paro nacional de trabajadores portuarios en demanda de lo que se ha denominado la “deuda histórica” (similar a la de los profesores) que tiene el Estado desde 1981 con los trabajadores portuarios eventuales, puesto que desde esa fecha se les aplica un descuento de 2% de impuesto a sus sueldos. En septiembre del año 2010 el Servicio de Impuestos Internos dictó una circular en que establecía claramente la manera de tributación de todos los portuarios del país. Sin embargo, las empresas han seguido descontando estos impuestos a los trabajadores y desconociendo que los descuentos ilegales se realizan desde hace más de 30 años. La posición del gobierno es como siempre pro empresarial, puesto que ha ofrecido a los trabajadores devolver los excedentes sólo de los últimos 3 años.
La paralización nacional se realiza en un contexto en que los portuarios de Talcahuano y Coquimbo se encuentran en una tremenda incertidumbre respecto a su futuro laboral puesto que dichos puertos fueron recientemente licitados a empresas privadas. Lamentablemente los trabajadores portuarios de Valparaíso y San Antonio (2 de los principales puertos del país) no se sumaron a la convocatoria de paralización, mientras que en el resto de los puertos (Arica, Iquique, Tocopilla, Chañaral, Caldera, Huasco, Coquimbo, San Vicente, Lirquén y Coronel) la paralización no permitió la descarga de barcos y las tomas de las oficinas aumentó la presión hacia el gobierno.
A esta paralización se sumaron trabajadores portuarios de diversos puertos del país, como los de Coquimbo puerto donde alrededor de 200 trabajadores paralizaron las faenas y marcharon por las calles céntricas del puerto en un contexto en el que dicho puerto se apronta a pasar a manos de un concesionario privado que controlará el puerto de manera monopólica (al igual que el de Talcahuano) dejando a cientos de trabajadores cesantes debido a la tercerización de la mayoría de sus funciones por lo que han debido realizar negociaciones para recibir una pensión o indemnización por las consecuencias que traiga este proceso de privatización, llamado modernización, del puerto; estas indemnización y pensiones las vienen exigiendo desde que se confirmó la privatización hace ya 1 año, cuestión que nunca solucionará los problemas de los trabajadores y de sus familias. Fue bajo este escenario que los trabajadores de este puerto, aglutinados en sus 5 sindicatos realizaron la paralización que se aprecia en las fotos que aquí adjuntamos.
En un comunicado la Unión Portuaria de Chile señaló: “que de no dar una respuesta satisfactoria a nuestras demandas en las próximas horas no descartamos radicalizar la movilización nacional con las consabidas consecuencias para la economía nacional”. La Confech señaló que apoyaba la movilización, sin embargo no se vio la unidad en la acción en los recintos portuarios. Es de esperar que la lucha social adquiera carácter político al sumar a otros sectores del campo popular y así como ayer la Unión Portuaria solidarizó con los estudiantes éstos se unan a la clase trabajadora en una sola gran fuerza.
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